El Tribunal General de la Unión Europea (TJUE) anula la multa de 1.060 millones de euros impuesta a Intel en 2009. La multa fue por supuestos abusos monopolísticos en el mercado mundial de procesadores.
Tribunal General de la Unión Europea anula la multa impuesta a Intel
Intel fue investigada por haber ofrecido descuentos agresivos a cuatro fabricantes de portátiles. Entre 2002 y 2007, aparentemente ofrecieron grandes descuentos a Dell, Lenovo, HP y NEC. La condición era que comprarán la práctica totalidad de procesadores x86. La Comisión Europea investigó esta práctica que buscaba excluir del mercado a los competidores de la compañía.
Estos descuentos y pagos, garantizaron según Bruselas, la fidelidad de los fabricantes de portátiles mencionados y del gigante de los electrodomésticos Media-Saturn. Algo que genero una reducción de la competencia.
La Comisión ha dicho que esta conducta de Intel es contraria a la competencia. Habría provocado a una reducción de oferta a los consumidores y los incentivos de la innovación. Ante esto, en 2009 les impusieron una gran multa de 1.060 millones de euros, que en su momento fue un gran récord.
Posteriormente, Intel decidió presentar un recurso. Dicho recurso fue desestimado por parte del Tribunal General mediante sentencia del 12 de junio de 2014. Ahora el TJUE ha anulado la primera sentencia en segunda instancia. Se habían detectado importantes errores de derecho y se ha devuelto el caso al Tribunal General.
Según el fallo, el análisis del Ejecutivo comunitario no estaba completo y «no permite demostrar de modo jurídicamente suficiente que los descuentos condicionales concedidos por Intel podían o podrían producir efectos contrarios a la competencia»
La multa de 1.060 millones contra Intel ha sido anulada por parte de la TJUE en su totalidad y no de forma parcial. Ahora el Ejecutivo puede poner un recurso de casación ante el TJUE, que se limitaría a las cuestiones de derecho.
